Hace unos meses tuve la suerte de hacer un curso de conservas artesanas en el centro rural de cursos prácticos y actividades El espíritu del bosque, en plena sierra de Madrid y en contacto directo con la naturaleza. Debo confesar que me encantó la experiencia y aprendí distintas técnicas de conservación de alimentos, entre ellas el embotado de frutas.
Ésta técnica que nos enseñó Juan Carlos Menéndez, jefe de cocina con gran experiencia y colaborador habitual en Telemadrid y Canal Cocina, es muy sencilla, lo único hay que tomar las medidas necesarias para no tener ningún problema con alguna toxina, sobre todo para evitar el botulismo.
La toxina botulínica es producida por la bacteria Clostridium botulinum que se encuentra en zonas contaminadas sobre todo en el suelo y aguas no tratadas y pueden desarrollarse en los alimentos sometidos a procesos de elaboración incorrectos o almacenamientos inadecuados.
Ésto podemos evitarlo creando un medio ácido, ya que la bacteria botulínica necesita para su desarrollo medios poco ácidos o alcalinos, con valores de pH superiores a 4'5, esto lo conseguimos añadiendo zumo de limón a las conservas de frutas.
CEREZAS EN ALMÍBAR DE AGUARDIENTE
Ingredientes:
Las medidas son para frascos de 450 g.
- Cerezas no demasiado maduras
- 50 g. Azúcar por cada frasco
- 50 ml. Aguardiente o Kirch
- Agua hasta rellenar el frasco
Elaboración:
- Frascos previamente esterilizados y secos, con la tapa en perfectas condiciones
Lavamos bien la fruta y escurrimos. Para la preparación del almíbar, echamos en azúcar en el fondo del frasco, yo he puesto un poco mas de lo que recomienda y añadimos un poco de agua y el aguardiente. Removemos para que se diluya un poco el azúcar.
Agregamos entonces las cerezas sin apretar para que la fruta esté suelta, añadimos unas gotas de zumo de limón y el resto del agua hasta el diámetro de embocadura, que es justo en la primera vuelta de la tapa del tarro y cerramos bien los frascos.
Ponemos agua a calentar en una cazuela y esté tibia, metemos los frascos, es mejor introducirlos con el agua ya un poco caliente, para que el agua llegue pronto a ebullición, así conseguiremos que la fruta tenga un punto crujiente y no esté demasiado blanda.
Añadimos agua suficiente para cubrir los tarros y cuando comience a hervir dejamos cocer 5 minutos. Sacamos con mucho cuidado para evitar que se rompa el vacio y dejamos enfriar. Conservamos en un ambiente seco y oscuro.
Ohhhh tengo todos los ingredientes!!!! Que buenas y que buena idea! Me ha encantado! Ya te cuento. Bss
ResponderEliminaruna autentica maravilla!!!! esto esta para comer de vez en cuando y darse un homenaje!!! delicioso
ResponderEliminarHija de mi vida, no paras!! pero nada, mientras que sea para visitar ciudades y celebraciones familiares genial. Las cerezas se ven estupendas
ResponderEliminarbesos
Tengo ganas de hacer algún taller del tema de conservas. Estaba pensando en uno que hay en un pueblo De Madrid yendo por la carretera de Burgos pero v ver qué tal éste sitio que dices.
ResponderEliminarHe tenido que dividir el mensaje....ainssss.
ResponderEliminarLa receta fantástica. Tenía en pendientes para este año algo parecido con otro licor y estoy segura de que las cerezas quedan estupendas y lo que dices ...para tener todo el año.
Un besote muy fuerte y que pases una buena semana
Hola, tu receta es toda una delicia, queria saber si es posible cambiar las cerezas por alguna otra fruta, tal vez fresas o mango.
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por estas delicias